Mathieu van der Poel (AlpecinI) ha vuelto a dar una lecciónnde gran clase al ganar la Milán - sanremo, después de 294 kilómetros de recorrido y atacando a tan solo 300 metros de la cima del Poggio, jugándosela en la bajada y aguantando en el llano para rememorar la victoria de su abuelo, Raymond Poulidor en 1961. Ahora ya tiene tres monumentos: dos Tour de Flandes y una Sanremo.

Una vez controlada la escapada del día, todos esperaban el ataque del UAE y de Pogacar en la Cipressa, pero no ha sidonasí. Han marccado el ritmo a mitad de la subida (luego Van der Poel ha explicado que el viento pegaba de cara) pero no ha sido suficiente para eliminar muchos rivales, quizás algunos esprinters.

En la decisiva subida final al Poggio de Sanremo, el Bahrain del anterior ganador, Mohoric, dorsal número uno, y del viscaíno Pello Bilbao, ha marcado un ritmo fuerte con hasta cinco corredores, el último de los cuales ha sido el gernikarra, pero la selección no ha hecho más que provocar el ataque del UAE con Tim Wellens, tirando de Pogacar, para hacer la selección definitiva.

En ese reducido grupo el que ha atacado, violentamente, a menos de medio kilómetro para la cima ha sido Van der Poel, que ha pasado con cuatro segundos por la curva a izquierdas del a cima con apenas cuatro segundos de ventaja sobre un terceto formado por Pogacar, Van Aert y Ganna.No le han cogido.

En la recta de meta, mientras Van der Poel festejaba su triunfo, Ganna ha batido a Van Aert y a Pogacar, conformando así el podio de una Sanremo en la que, de nuevo, el Poggio, subido a velocidad estratosférica, ha sido decisivo.

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